Después de tantos cursos, de tantos años, de tanto recorrido, (y lo que falta)…me sigo sorprendiendo con lo reduccionistas que llegamos a ser en muchos ambientes, supuestamente abiertos.
Cuando la gente dice fluye, confía, todo pasará, todo llega cuando es adecuado…eso que te molesta es algo que te tienes que mirar en ti… vaya, ¿no os entran ganas a veces de…hummm?…
Si fuese tan fácil fluir, confiar…supongo que la mayoría lo haría, salvo masoquistas, chico, dime como fluyo, dame la clave, claro que no son malos consejos pero me parecen muy frustrantes a veces, me hacen sentir que tengo un defecto de fábrica.
Además si estamos en el camino de crecimiento personal no podemos sentir rabia, ni tristeza sin más, ni podemos ir de copas y bailar, solo bailar, no digo hacer danza chamánica, biodanza o los cuatro ritmos (que me encantan todas ellas, que quede claro)…
Creo que se nos va a veces nuestra humanidad, nos olvidamos que somos SIMPLES SERES HUMANOS, y que si no la fastidíasemos de vez en cuando sería muy aburrido y no tendríamos nada que hacer aquí.
Que a veces lo más espiritual, lo que más ayuda a crecer (al menos a mi) es darme la posibilidad de conocer gente nueva, que aporta experiencias de vida extraordinarias, por ser las suyas, no por ser fascinantes o superoriginales.
Y es tomando una caña con gente que aparece de repente en tu vida, que no es un buda, pero tiene vida en los ojos, ganas de compartir y es generoso contando su historia o sonriendo mientras bailas, que de repente sientes la conexión con todo.
Cuando un amigo rompe con su pareja ¿qué tengo que decir? ¿y si se le muere su padre?, ¿y si le diagnostican algo con lo que no contaba? ¿debo decir que cada uno tiene su momento? de verdad…¿de verdad?…, solo, creo yo, opino yo, solo hay que acompañar, estar, de la manera que le venga bien al que sufre, ir de compras, me vale, tomar una caña, me vale, un paseo, me vale…pero no seré yo quien le hable en ese momento de fluir, de confiar, al menos mientras no descubra el secreto mejor guardado (más que el del santo Grial) de cómo se hace eso, porque yo, solo soy, una ser humana, imperfecta y extraordinaria.
Si necesitas que te acompañe, silva.
